Hace unos minutos entré a la cocina con hambre y vi esta ollita
Era perfecta, tenía nopalitos, papitas y alguna carne roja, todo eso remojado en algo así como chile pasilla, mmmmmm, MA.RA.VI.LLO.SO, pensé yo...
La maravilla acabó cuando me acerqué a oler y descubrí que no era nada de lo que había pensado, eran como tortitas de camarón con papitas y nopalitos, guácala. Lo absurdo es ver una ollita que hace que a uno se le haga agua la boca, y que en realidad sea algo que si uno se mete a la boca se vomitaría.
Afortunadamente no hice lo que tenía en mente que era tomar una papita y comérmela, me hubiera vomitado, odio el olor de esos camarones apestosos.
4 comentarios:
No me gustan los nopales! Pero el otro día una amiga me dijo que se comió la comida del perro, porque su mamá le hizo a la mascota un estofado. Reí mucho y ahora le ladramos en son de burla.
Somos malos.
Yumi yumi!
Como cuando crees q es un buen libro xq la portada tiene un dibujito animado y resulta un desastre.
M*
Waa! Es horrible! Hace unos días me regalaron un reno lleno de según yo lunetas (ERAN IGUALITAS!!!) y cuando quise morderlas, zaz! Eran caramelos... y dolió. :(
A mí sí me gusta todo eso. Es más, mi madre va a hacer camarones hoy. Qué jeje ver una foto de tortitas de camarón en un blog.
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