domingo, 25 de enero de 2009

en un concierto siempre pienso en todas las personas que no están ahí y que hacen más por el mundo que el tipo que está cantando en el escenario

cosas que me deprimen y que hacen que el alma se me caiga en pedazos, o al menos un pedazo:

-usar traje
-los días soleados
-inmiscuirte en la vida de alguien y no darte cuenta de cómo pasó
-saber qué hora es
-que me dejen plantado
-la gente en general
-que se tarden en responder en el messenger y que alguien escriba con puros emoticones, cuando pasa eso, pienso: "se cayó, valió madres"
-que la gente restrinja su perfil del hi5 o del facebook y no me deje husmear en sus fotos cándidas


cosas que me ponen de un humor excepcional:

-que haya futbol en la tele
-mucha comida
-libros nuevos
-20 comentarios en los posts
-mercados de pulgas
-ruido
-japonesas



si este fuera mi examen de aptitudes en un empleo oficinista, creo que me darían un empleo junto a la fotocopiadora.



en la escuela no te preparan para varias cosas, por ejemplo, cómo sentir pena por alguien (cuando tus relaciones intraescolares se reducen a golpe-golpe o tímido-tímido las posibilidades de hacerte cargo de tu propia cara se reducen considerablemente) o cómo decirle a alguien que tiene el fracaso tatuado en la frente.



seguro te las ingeniaste para cometer todos los errores que has cometido, uno por uno, en orden, uno más tremendo que el otro.



en una oficina organizan un equipo de futbol y después resulta que es una trampa para obtener un perfil psicológico de los empleados. el portero era un esquizoide. eso explicaba dos cosas: que saliera mal en casi todas las jugadas, y que hubiera clips clavados en las hojas del ficcus del cuarto de la fotocopiadora.


pusieron ese ficcus para darle un aire de calidez y humanidad. mala idea.



un niño tiene padres actores de teatro, gesticulan demasiado, van a marchas de protesta, tienen mal gusto musical y exageran su estrafalariedad fingiendo ser de trato dócil, 'easygoing'. el niño siente que su vida es como un "tras bambalinas" eterno, sobre todo cuando meten lo que compran en el super a la alacena o cuando firman su boleta cada cierto tiempo.



tras años de ser sólo "roberto" en las firmas de boleta de mi primaria, estaba seguro, en la primera firma de boletas de la secundaria, que cuando llamaran a mi mamá por ser madre de un tal "garcía hernández" no iba a reaccionar porque no iba a sonarle familiar el nombre. pasó justo eso, tuve que decirle: "soy yo, mamá".



me enoja leer datos del tipo "si unieras todas las venas de tu cuerpo podrían darle tres vueltas a la tierra". me enoja, creo, porque no tengo a nadie a la mano para decirle: "no, imbécil, eso es imposible"



en una oficina le ponen chips de localización a los empleados. los sujetos encargados de supervisar que los empleados no se muevan de su margen de maniobras (sus cubículos, el cuarto de la fotocopiadora), se divierten poniéndoles motes a los puntos luminosos que representan a los empleados: "nervioso", "piedra", "punto de crisis", "perro chihuahua", "reprimida". uno de ellos le dice al otro: 'estaba en la cafetería y creo que "trastorno emocional constante" realmente se llama sofía'. estallan en carcajadas.

4 comentarios:

isis dijo...

Absurdo número 1: Cuarto de la fotocopiadora.

Absurdo número 2: Ficcus en el cuarto de la fotocopiadora.

Reacción lógica: Llenar de clips el ficcus del cuarto de la fotocopiadora.

Octopus Queque dijo...

"o cómo decirle a alguien que tiene el fracaso tatuado en la frente."

Esto es genialidad, tan pura como unos gramos de la mejor cocaína. Me llegó. La escuela es una cosa harto imbécil si no te enseñan a ser humano. Dicen que hoy en día namás vamos a que nos echen aceite y revisen si no hay cortos circuitos. Yo ya estoy en reciclaje.
Lo de los errores también es la pura verdad.

Genial, indeed.

[cacto kaür] dijo...

A mi también me emputa que la gente haga privados su perfiles. ¿por qué ? no se si la mayoría de las veces ni los conozco, pero me emputa

La Bota y la Falda dijo...

He coincidido contigo ... eres genial... un golpe a tu ego!

M*